La Salvia es un tónico y estimulante general, tiene propiedades diuréticas, antisudoríficas, antiespasmódicas, aperitivas, estomáquicas, emenagogas, depurativas, antisépticas, cicatrizantes y astringentes.
Se puede emplear tanto para uso interno como externo, y en fución del uso trata ciertas patologías:
- Uso interno: Convalecencias, agotamiento, afecciones nerviosas (temblores, vértigos, parálisis), respiratorias, urinarias, pulmonares, dismenorreas, menopausia, esterilidad, sudores nocturnos, etc.
- Uso externo: Aftas, estomatitis, anginas, llagas, úlceras, etc. modo de uso:
Elaborado con plantas procedentes de cultivos limpios, en los cuales no se han empleado abonos inorgánicos, herbicidas ni pesticidas.
- Composición
Ingredientes: Aceite de Salvia Officinalis, Linalol, Limoneno.
Producto natural con extractos vegetales.
- Modo de empleo
- Uso interno: 2-5 gotas por toma, 2 ó 3 veces al día, en una cucharadita de miel o en un terrón de azúcar moreno o añadida a cualquier tipo de infusión (mejora el sabor de éstas). Dosis máxima: 0,30 g/día (45 gotas = 1g).
- Uso externo: Compresas, fricciones, enjuagues con la esencia disuelta en alcohol.
- Presentación
- Cantidad
- Indicaciones
- Aftas
Agotamiento físico
Agotamiento físico
Angina de pecho
Dismenorrea
Estomatitis vesicular
Menopausia
Ulcera estómago
Vértigos - Áreas
Hombre
Mujer- Sistema
- Aparato Digestivo
Sistema Nervioso Central - Plantas / Componentes