Combate la sensibilidad dental

La sensibilidad dental, o también denominada hipersensibilidad dentaria, es una patología que afecta aproximadamente al 30% de la población adulta y suele aparecer entre los 18 y 40 años de edad. Ésta se caracteriza por una sensación de frío y dolor intenso en un diente o zona localizada que puede llegar a afectar en actividades tan cotidianas como el comer. 

Esta molestia se desencadena cuando un estímulo externo entra en contacto con la dentina, la parte interior del diente. Se trata de una sensación dolorosa y localizada que repercute en muchos aspectos de la rutina diaria. 

Causas

La sensibilidad dental se produce en consecuencia a factores como el desgaste del esmalte, enfermedades bucales como gingivitis, caries o a causa de tener las encías traídas. El principal desencadenante de este problema son los malos hábitos adquiridos en la rutina de higiene diaria.

Con el paso del tiempo, y debido a una higiene deficiente y malos hábitos, se produce la disminución de la sensibilidad de los nervios y de la permeabilidad de la dentina. La dentina está rodeada y protegida por el esmalte y cuando éste se pierde, queda desprotegida de los agentes externos y es cuando se genera la hipersensibilidad dentaria. 

Esto provoca que cualquier alimento o bebida que entre en contacto con los dientes se manifieste con una sensación de molestia o incluso dolor. Cuando ese estímulo dejar de tener contacto con la zona sensibilizada o el diente, la molestia tiende a desaparecer.

En algunas ocasiones, esa sensibilidad persiste incluso sin haber un estimulo externo y es cuando se produce la posibilidad de que exista alguna enfermedad bucodental. En casos así, es vital acudir a un profesional para que realice el diagnostico necesario para tratar el problema que pudiese haber. 

Medidas para prevenirla

Una de las medidas mas importantes es la del mantenimiento de la higiene dental mediante el uso de pasta dentífrica, hilo y enjuague bucal adecuado para cada caso. También será necesario adquirir buenos hábitos alimenticios y evitar el consumo de alimentos o bebidas que pudiesen dañar el esmalte. 

Asimismo, las pastas desensibilizantes serán un aliado para aquellas personas que padezcan una alta sensibilidad a bebidas frías ya que proporcionan una adecuada remineralización en aquellas zonas que están dañadas. 

No hay que olvidar las visitas al especialista que serán necesarias para realizarse las revisiones oportunas y así, preservar la salud de los dientes y poder prevenir futuros problemas.

Complementos alimenticios

Los complementos alimenticios son la opción perfecta para fortalecer la salud bucal y poder mantener su óptimo estado de salud. 

Entre los productos más recomendados se encuentra Holomega Encías y Dientes que proporciona un aporte de vitaminas, minerales y antioxidantes destinados a la recalcificación y restauración de las estructuras debilitadas y evitando la degeneración.

También tenemos Holovit Vitamina D3 que se trata de la vitamina más importante para el mantenimiento de los dientes en condiciones normales.

Otro de los apoyos en la prevención, tratamiento de infecciones bucales y la salud de dientes y encías es Microbiota Prodental. Este producto está formulado con probióticos que tienen el objetivo de equilibrar la flora y ayudar a combatir infecciones. Además, contiene vitaminas y minerales imprescindibles para la regeneración de encías y dientes.