Cómo frenar la caída del cabello
Con el cambio de estación, principalmente del verano al otoño, se producen cambios en la rutina diaria y en la alimentación que acaban afectando a nuestro organismo. Es el caso de la caída del cabello, que se incrementa considerablemente en estas fechas.
La caída estacional está ligada especialmente a los cambios ambientales y climáticos como son los cambios de temperatura y de las horas de luz. Es una consecuencia normal que no debe preocuparnos siempre y cuando exista el equilibrio entre el pelo que nace y el que se cae y sea algo controlado y temporal.
También es necesario tener en cuenta que, en verano, el cabello ha estado expuesto a agresores externos como el sol, el cloro y la sal, entre otros, que lo dejan más débil y apagado.
Señales de caída capilar
La progresiva caída del cabello en esta época es una situación totalmente normal y según numerosos profesionales del sector una persona en condiciones saludables puede sufrir la pérdida de 100 cabellos diarios. Además, en otoño esa caída puede duplicarse, pero afortunadamente es algo temporal.
Una de las señales más comunes que nos indican que el comienzo de ese aumento de la caída del cabello está ocurriendo es el encontrarse abundantes pelos en la almohada y en la ducha.
Cuando la densidad de cabello perdido debe convertirse en motivo de preocupación es cuando aparecen calvas que alertan de que la pérdida de pelo ocurrida es mayor de la que debería ser. En ese caso sería necesario consultar con nuestro médico o dermatólogo experto en este tipo de patologías para determinar una temprana solución.
Pautas para minimizar la caída
Una dieta equilibrada y completa en todos los nutrientes y especialmente rica en vitaminas y minerales como el hierro será beneficiosa para tratar de minimizar en lo posible la caída del pelo en esta época. De esta manera propiciaremos un correcto funcionamiento de los folículos y conseguiremos un cabello más sano. Por ello hay que evitar las dietas hipocalóricas y pobres en nutrientes fundamentales ya que propician la pérdida de cabello.
También será importante peinarse suavemente y evitar aquellos recogidos que pongan el cabello en tensión. Asimismo, incorporar el masaje de cuero cabelludo en la rutina de cuidados ayudará a estimular la circulación que llega a los folículos pilosos beneficiando el crecimiento del pelo y fortaleciendo las raíces.
Entre los productos a utilizar serán recomendables aquellos que respeten el PH y los que estén compuestos por proteínas y aminoácidos que fortalezcan y estimulen su crecimiento. Por lo tanto, será necesario dejar de lado los que contengan compuestos agresivos como los que presentan algunas coloraciones. Es importante que todos ellos se adecuen a las necesidades de nuestro cabello para no sufrir el efecto contrario.
El incremento del estrés, generado mayormente por la vuelta a la rutina después del verano, es otro de los grandes enemigos de la salud capilar y del estado de salud nuestro organismo en general. Es por ello que hay que tratar de apaciguarlo en la medida de lo posible.
Complementos alimenticios
Los complementos alimenticios son un aliado para restablecer el equilibrio del cuero cabelludo y aportar fortaleza. Entre los mejores productos para frenar la caída se encuentra Holomega Cabello Annurca Plus que beneficia en la estimulación de la queratina para aumentar el volumen del cabello y ayudar a reducir su caída gracias a componentes naturales como la biotina, zinc, selenio y extracto de mijo. El zinc beneficia en la absorción de los nutrientes estimulando el crecimiento del cabello y la biotina es vital para evitar la pérdida capilar.
Otra ayuda para combatir este problema es Holomega Hair que contiene nutrientes beneficiosos para la salud capilar como son las Vitaminas del Grupo B, la Espirulina, Cobre y Zinc, entre otros. Esta composición aporta todas las vitaminas y oligoelementos necesarios para una buena salud y belleza del cabello, ensalzando el lustro, cuerpo, suavidad y fortaleza del cabello.