Como fortalecer el sistema inmunológico
Con la llegada del frío es común sentirse más cansado y débil y que se dé comienzo a la época de gripes, resfriados y enfermedades respiratorias. Se trata de una temporada en la cual nuestro organismo soporta diversos cambios en gran parte derivados de la reducción de horas de luz. Esto provoca que se genere un desequilibrio interno y que descienda la serotonina y con ella haya un bajón en nuestro estado de ánimo.
Los cambios repentinos de temperatura provocan a su vez que el organismo deba adaptarse para que las defensas puedan generar una respuesta inmediata a estos nuevos virus que aparecen. Esta situación impulsa a nuestro cuerpo a realizar un trabajo extra para poder mantener la temperatura interna y ello genera el debilitamiento del sistema inmune.
Pautas para reforzar las defensas
Para poder contrarrestar los efectos que esta nueva estación genera en nuestro sistema inmunológico, en primer lugar, será necesaria la ingesta de nutrientes que puedan proporcionarnos energía suficiente para afrontar el día a día. Un aumento del consumo de frutas, verduras y alimentos ricos en ácidos omega 3 nos aportarán vitaminas y minerales y con ello antioxidantes imprescindibles para potenciar las defensas.
No hay que olvidar que un adecuado aporte de proteínas, como las que se encuentran en el pescado o el pollo, también será necesario para nutrir nuestro sistema inmune. Además, deberemos dejar de lado la ingesta de alimentos ultraprocesados ya que solo aportan contenido calórico y no resultan nutritivos.
Además, es necesario tener en cuenta que lo que más beneficia al organismo en épocas de frío son los platos calientes ya que de esta manera se facilita la digestión al restarle al cuerpo el trabajo de tener que calentar esa comida antes de procesarla. Los alimentos más recomendados para aumentar las defensas son las verduras de hoja verde, el pescado azul y los lácteos fermentados.
Otro aspecto importante es el sueño. Deberemos dormir bien para que nuestro cuerpo libere toxinas y así levantarnos descansados. Por ello, establecer una rutina de sueño con unos horarios fijos y dormir al menos 8 horas diarias será vital para sentirnos renovados.
Asimismo, otro de los causantes del debilitamiento del sistema inmune es el estrés. Por esa razón, deberemos tratar de controlarlo en la mayor medida posible ya que de lo contrario provocará que disminuya la producción de glóbulos blancos encargados de luchar contra infecciones o agentes extraños.
Otro hábito no muy extendido y que deberíamos tener en cuenta es el de la higiene nasal. La cavidad nasal es una de las zonas del cuerpo que mas se ven afectadas durante la época de frío y es uno de los mecanismos de protección que tenemos para evitar la entrada de sustancias no deseadas. Por ello, para mantener la higiene de esta estructura, serán beneficiosos los lavados con agua de mar para arrastrar cualquier residuo que pueda haber, favorecer la humectación, eliminar la mucosidad y evitar la obstrucción de las vías respiratorias y con ello la congestión nasal.
Complementos alimenticios para beneficiar a las defensas
Los complementos alimenticios son una excelente ayuda para poder aportar un refuerzo extra a nuestras defensas.
Uno de los productos estrella es Holofungi AHCC Plus. Se trata de un potente activador del sistema defensivo que beneficia el que se produzca una respuesta inmediata del organismo frente a infecciones o situaciones de estrés.
Otro de los grandes aliados es Holomega Inmuno-Betaglucanos 1,3 Fermentados, que estimula las células del sistema inmunológico de forma natural. Asimismo, potencian el crecimiento de bacterias sanas, como Lactobacillus y Bifidobacterium, donde residen la mayoría de las células inmunes del organismo.
Los probióticos también son necesarios para beneficiar a las bacterias intestinales. Es el caso de Microbiota Defensa que ayuda a equilibrar y potenciar el sistema inmunológico protegiendo al organismo frente a virus, bacterias y hongos, entre otros.